Purita música para hablar
La noche del viernes se ‘enciende’ a eso de las nueve cuando las luces de los carros van a mil, el frío se hace más intenso y los bares abren sus puertas. El olor a smog mezclado con humedad y la ciudad sospechosa crean un ambiente hostil mientras que un consejo hecho pregunta aparece, ¿quién toca hoy? El barrio Quinta Camacho, con sus casas grandes y jardines de lo más elegantes, entre la calle 72 y 67, tiene una magia en sus alrededores donde el arte, la música y unos cuantos cócteles juegan con el cansancio de una semana pesada en un bar: *matik-matik*.
Una puerta de garaje hecha portón y un letrero que dice *matik-matik* muestran la entrada a ese bar que se viste de rojo con CD’s a la izquierda y unos cuantos vinilos a la derecha, todos a la venta. Al fondo, cruzando tres cuadros psicodélicos de Mao Zedong, un piano de cola al revés y la barra del bar donde venden cerveza, guaro o ron, hay un set de DJ de dos tornamesas que se activa cuando se silencia la batería y la guitarra que están en la tarima de no más de veinte centímetros de alto. Hay pocas mesas, pero varias sillas mirando a la tarima porque hay música en vivo. Lo demás es magia: acordes suaves, olor a cigarrillo, cortas charlas, una voz que hipnotiza, risas y un ambiente donde lo bohemio predomina. Allí, en *matik-matik*, hay purita música para hablar.
Direcciones: carrera 11 #67-20
Teléfono: 249 98 32
Horario: mie-sáb: 6:30pm-3:00am.